miércoles, 6 de junio de 2018

EL ÁRBOL POLITIQUERO DE LA CIENCIA

MINISTRAS/OS, CONSEJERAS/OS, DIRECTORAS/ES GENERALES, …, PARA LO QUE HAGA FALTA Y SE MANDE. ¡SERVICIO TRANSVERSAL A DOMICILIO!

En todos estos años, observando los movimientos de importantes cargos en los distintos servicios de la Administración, lo que más me ha sorprendido -y causado admiración sin límite- son las ilimitadas capacidades que con absoluta certeza atesoran algunas/os conciudadanas/os para disfrutar -como así disfrutan- de la ilimitada combinatoria de nombramientos, ceses y nuevos nombramientos como ministras/os, consejeras/os, directoras/es generales, delegadas/os provinciales, jefas/es de servicios, etc., de las distintas ramas del gran árbol que es la Administración (europea, nacional, comunitaria o provincial), y en el que todas/os ellas/ellos saltan de rama en rama sin volver a pisar nunca más el suelo por el que caminan el común de los primates. Ni salgo ni quiero salir de mi asombro y admiración por tan encumbrada excelencia.

El personal profesional de la política es el más innovador con creces: su don de la ubicuidad cargeril es modelo a seguir para un manejo efectivo/eficiente de la complejidad de nuestros días, donde es más importante un saber transversal que la ignorante especialización de los distintos saberes. Claro que no logro dar con la razón última de que, por ejemplo, alguien con especialidad en medicina y que ha sido consejera o consejero de sanidad no pase a ser conserja o conserje de un hospital, pero sí consejera o consejero -ministra o ministro- de hacienda. ¿Por qué tiene estas cosas la sapiente transversalidad que rompe su línea de transversalidad? Me da vergüenza preguntarlo, más que nada porque preguntar estas ñoñerías (demagógicas las calificarán los demagogos transversales) es impropio de quien se tiene a sí mismo por un filósofo a tiempo completo, es decir, incapaz para hacer otra cosa que mal filosofar. Estoy que les reverencio con todo mi pobre espíritu: desde Hegel, no ha habido en neocórtex cerebral tanta concentración de saber enciclopédico. 

Por favor, que no se pare ese eterno retorno de mismas y de mismos, al menos mientras haya dinero, y aunque no lo hubiere, para pagar asesores que también sean transversales en la debida línea sucesoria de nombramientos entre afines. Y encima algunas/os lo airean como un servicio sacrificial. ¡Manda cargo!

Nota: La débil esperanza democrática es que de vez en cuando alguien de esos afines, que no está de acuerdo con los cambios de turno, pregunta en tono amenazante y con un periódico en la mano: «¡Oye, a ver cuándo me toca y me toca bien!». 

(tvb)