jueves, 21 de abril de 2022

INFUTURA PASCUA

Mañana no vendrá ninguna nube gris 
que descargue su agua de compasión

en cuerpos pestilentes y de tormento,


ni lluvia dulce que ablande los dolores 

ni limpie de pus este siniestro mundo

ni viento limpio ni la tórtola en su vuelo.


Nos aguarda un tiempo fiel en torturas,

con secas tormentas de un seco estío,  

cuyos rayos incendiarán estos campos


en los que ahora yacemos, para avivar

el hedor de una vida plena de llagas

abiertas como surcos sobre la espalda,


por donde los punteros rayos de culpa  

-caídos desde el cielo podrido y oscuro- 

se deslizan hacia la tierra del destierro.


¿O serán tal vez sonrisas acompasando 

la sorpresiva faz de muerte -inhumana-

con bellos rostros de tu vida renaciente?


Todo sea, si es así tu voluntad, salvo 

que tu silencio, oh Señor, fuera mudez;

que tu retirada, nuestro final abandono.



(tvb)