viernes, 1 de junio de 2012

FRENTE A MÍ LA IMAGEN


Frente a mí la imagen
la visión cambiante del paso sucesivo
de los años, la noche
entre las líneas suaves del alcohol
                                                      o abruptas,

y este miedo
que serenamente penetra como aspirar oxígeno,
y este perfecto desarraigo de saberse sin resaca
testimoniando que fuimos

nosotros,

quienes ceñidos a una cintura paseamos
por estas calles,
quienes agradecidos contemplamos las obras
de arte, los edificios,
las ciudades que existen y las otras
construidas bajo la lucidez,
                                         desconcertados.

Sentir calladamente externo que nada
queda.

Apurando tembloroso los vasos.

Perder el tiempo
                y ganar la vida.

(Juan Enrique Espinosa)